Tanto en la construcción de la línea a 230.000 voltios en la zona del Guavio, como en la de la Subestación Nueva Esperanza en Soacha y en la ampliación de la Subestación Bacatá en Tenjo, el proyecto se ha convertido en una fuente de empleo temporal que beneficia a muchas familias de la región.

Este es uno de los programas contemplados en el Plan de Manejo Ambiental del proyecto.